lunes, 9 de abril de 2018

ASCENSIÓN AL ALMIREZ Y AL CHULLO

MÁS FOTOS DE LA ACTIVIDAD: AQUÍ

Los pasados días 7 y 8 de abril nuestro club llevó a cabo la ascensión al Chullo (2.611 m.) y al Cerro Almirez (2.519 m.) primera y segunda cumbre en altitud de la Sierra Nevada almeriense.

Las previsiones meteorológicas sin ser muy malas tampoco eran las adecuadas, pero consideramos que con algunas limitaciones, y cambiando algún objetivo, podríamos llevar a cabo la actividad, y así fue, a pesar de unas condiciones invernales disfrutamos de las dos ascensiones.

Al llegar al Puerto de la Ragua teníamos dos posibilidades: realizar el Corredor Central del Morrón del Mediodía, o realizar la ascensión al Chullo.
La ascensión del corredor es más difícil y por lo tanto requiere de unas condiciones meteorológicas adecuadas. La ascensión al Chullo es fácil, y aunque las condiciones no eran buenas se podía realizar sin ningún problema, así que optamos por esa opción.

Comenzamos la ascensión sin nieve, el Puerto de la Ragua está en torno a los 2.000 y la nieve suele durar poco.

Al llegar a los primeros neveros nos calzamos los crampones. Inicialmente no había hielo y la nieve no estaba dura, pero hacía bastante frío, por lo que previsiblemente cuando se fuera tomando altura las condiciones irían cambiando.

La niebla, el viento y la nieve comenzaron a hacer acto de presencia. Con esas condiciones, aunque la ascensión sea fácil y se conozca el itinerario, la utilización del GPS es fundamental.
 
Y así llegamos a la cumbre del Chullo. Aquí la expedición al completo a falta del que hizo la foto.


Iniciamos la bajada, y en las últimas palas de nieve estuvimos practicando las diferentes técnicas de autodetención con el piolet, algo que es conveniente recordar todos los años y que de forma habitual nuestro club piensa llevar a cabo las próximas temporadas.


Antes de llegar a la Ragua tuvimos un agradable encuentro con estos apacibles caballos



No iba a ser todo padecer, desde la Ragua nos fuimos al refugio de la Dehesa de la Yedra, lugar donde íbamos a pasar el resto del día y la noche. 
Unas cervezas, un buen vino y una copiosa cena nos puso de nuevo las pilas para acometer nuestro siguiente objetivo: la ascensión al Almirez. 

Comenzamos la ascensión al Almirez enfilando el cortafuegos del Rosal


Llegado un punto, dejamos el cortafuegos, para siempre en ligero ascenso llegar a la base del corredor norte del Almirez.    


Llega el momento de ponerse material: crampones y piolet son imprescindibles, y el arnés es conveniente en previsión de que haya que utilizar la cuerda.   



Un corredor precioso encajonado entre verticales paredes y un estado de nieve excepcional nos hizo disfrutar como niños. Si a estas condiciones le añadimos el día invernal y de espesa niebla, el cóctel es perfecto. Estando ahí metido uno no puede creer que se esté en el sur de España.


Una vez superado el corredor, llegamos al collado del Almirez. Ascendemos un poco más y realizamos una corta parada para tomar algo antes de afrontar el último tramo de la ascensión.    



Un tramo mixto nos conduce hasta la cumbre norte del Almirez (2.514 m.), y poco después llegamos a la cumbre sur (2.519 m.), culminando así la ascensión a esta magnífica montaña por una de sus rutas más espectaculares.  


La ascensión a una montaña se culmina en su cumbre, pero no acaba hasta que se llega abajo. Comenzamos la bajada con la máxima precaución. Precaución para no perdernos por la niebla y por lo delicado del terreno.


Y de momento ... un claro en la niebla y divisamos de nuevo el cortafuegos del Rosal, zona por donde hemos comenzado la ascensión.

La expedición al completo sin problemas.
Una magnífica actividad realizada una año más por el Club Montañero de Yecla